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El año 2022 estableció un récord histórico de inversión inmobiliaria en España con un volumen de 16.400 millones de euros en transacciones, un tercio más que en 2021. Además, si se incluyen las operaciones corporativas, la inversión inmobiliaria se disparó hasta los 17.500 millones, según ha informado la consultora Catella.

«Los yields volvieron a subir en todos los tipos de activos debido a la incertidumbre, el encarecimiento de la financiación y la elevada inflación», apuntan desde la compañía, que ha indicado también que la actividad se ralentizó tras el verano, anticipando la tendencia que se va a vivir en la primera mitad de 2023.

Por tipos de activos, se mantuvo el interés por el sector residencial, que fue uno de los más demandados, con una inversión de 3.100 millones de euros, representando el build to rent el 60% de la inversión.

Con unos 2.800 millones de euros invertidos durante el año pasado, el sector de oficinas siguió siendo estratégico y el interés de los inversores por localizaciones y activos prime continuó siendo alto. «La demanda se centró en propiedades core con altos estándares ESG por su seguridad y liquidez en el mercado», explican desde Catella.

Respecto al sector hotelero, la consultora ha señalado que en 2022 se invirtieron 2.400 millones de euros. Asimismo, si se tienen en cuenta las operaciones corporativas de GIC y Sancus, la inversión alcanzó los 3.300 millones.

Pese al descenso del volumen de inversión, la logística se mantuvo a lo largo del pasado ejercicio como uno de los tipos de activos más demandados, alcanzando una inversión de 2.250 millones de euros.

Por último, el interés por los activos alternativos creció en 2022 hasta los 1.950 millones de euros, casi el doble de la inversión del año anterior. Las residencias de estudiantes y ancianos, y en general cualquier activo relacionado con el living, se encuentran entre los más atractivos en estos momentos.

*FUENTE: BRAINSRE.NEWS