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España cuenta con una población de 47,3 millones de habitantes de los cuales, 7.732.054 son jóvenes de entre 20 y 34 años, según datos del INE recogidos por la plataforma de big data inmobiliario Brains RE.

Más del 16% de la población española, de los que solo un 31% tienen una vivienda en propiedad, según el Observatorio de Vía Célere sobre vivienda. «La principal razón de los jóvenes para no poder acceder a una vivienda en propiedad es el precio de compra inaccesible y la inseguridad sobre si tendrán que mudarse en los años posteriores», explican desde la promotora.

Desde el Consejo de la Juventud en España, elevan incluso este porcentaje: solo el 17% de las personas jóvenes españolas viven emancipadas, que reflejan los peores niveles de emancipación desde el año 2001.

«El parón económico generado por la Covid-19 ha golpeado con dureza la juventud española, que todavía no se había recuperado por completo de la anterior crisis económica», explican desde el organismo. Esta caída en la tasa de emancipación ha sido la más profunda desde 1988 pero no ha afectado por igual a todas las comunidades autónomas.
Tan solo ocho de los 8.131 municipios que hay en España, aglutinan casi el 20% de la población de entre 20 y 34 años de edad. Estas zonas tienen un porcentaje de jóvenes superior al 1%.
A la cabeza se sitúa Madrid, destacando sobre el resto de municipios con un 7,69% del total de España, seguida por Barcelona con un 4,1%. Con un menor peso encontramos Valencia, con un 1,71%; Sevilla (1,48%), Zaragoza (1,36%), Málaga (1,3%), Palma (1,07%) y en octavo lugar, Murcia (1,05%).
Según el estudio Jóvenes y Vivienda 2020 de Aedas Homes, casi 2 de cada 10 jóvenes -el 18%- vive en una comunidad diferente a la que nació. Esta tasa se duplica entre aquellos que residen en una vivienda en alquiler.

En los próximos 15 años, se prevé que en España aumente en 954.497 los habitantes, según el INE. Esta cifra que situaría a España como el cuarto país más envejecido de la Unión Europea.

En concreto, en 2050, se prevé que en España, la población de más de 64 años supondrá el 31,4% del total, generando una necesidad en la oferta de residencias de la tercera edad. Según la proyección del organismo estadístico, la esperanza de vida continuará incrementando de forma progresiva. En 2069, se prevé que se alcance los 85,8 años de media en los hombres y los 90 en las mujeres. Esto supone un incremento de 4,9 y 3,8 años, respectivamente, respecto a los valores actuales.

*Fuente:Brainsrenews