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Un verano caliente, para recordar. Las transacciones del mercado inmobiliario en julio y agosto se han elevado a 3.488,9 millones de euros, gracias a operaciones de calado como la compra de las residencias de estudiantes de Resa por Pggm, en la que el fondo de pensiones neerlandés desembolsó 900 millones de euros para hacerse con la cartera íntegra que controlaban Greystar, Axa y Cbre. 

Además de la gran operación de Pggm, el volumen transaccionado en verano ha sido alentado por la venta de la histórica sede de CaixaBank, en el Paseo de la Castellana de Madrid, que la entidad financiera traspasó por 238,5 millones de euros a Inmo Criteria Patrimonio, filial de Criteria Caixa, la sociedad que gestiona el patrimonio empresarial de la Fundación Bancaria La Caixa. 

Otra operación relevante en el segmento de oficinas tuvo lugar a finales de julio, cuando GMP, la socimi de la familia Montoro y el fondo soberano de Singapur (GIC), compraron a la gestora alemana Freo el edificio de oficinas Mile 22@ por 220 millones de euros, que alberga la sede central de la empresa de delivery Glovo.
 Pocos días después, el segmento comercial volvió a ser protagonista con la recompra por parte de Banco Santander de una cartera de 380 sucursales a la aseguradora francesa AXA IM, por la que la entidad presidida por Ana Botín desembolsó unos 300 millones de euros. 

La recompra se justificó porque Santander evitaría así el pago de la renta de alquiler de las oficinas, que se había disparado con el aumento de la inflación. De hecho, Bbva hizo un movimiento similar en el primer trimestre del año con la recompra de 659 sucursales a Merlin Properties por 1.987 millones de euros.

El mercado de oficinas ya había empezado con fuerza en julio, con el anuncio de que Mutualidad de la Abogacía había vendido el edificio de la sede de Bbva en Bilbao a Argis, gestora independiente de capital inmobiliario, por un importe cercano a los 150
millones de euros.Pero no sólo en activos alternativos y oficinas se registraron grandes operaciones. En retail, el vertical de supermercados se volvió a reivindicar como la estrella inversora a principios de agosto, cuando la cadena Alcampo anunció un acuerdo para comprar a Dia 235 supermercados, con una superficie comercial de unos 180.000 metros cuadrados, por un 267 millones de euros. Junto a los supermercados, la operación incluyó el traspaso de dos naves logísticas que el Dia poseía en la provincia de Valladolid.

Antes de la operación entre las dos cadenas de supermercados, otra transacción en retail había levantado la sorpresa en el sector. A mediados de julio se anunció la compra por parte del fondo alemán ECE del centro comercial Splau en Barcelona por unos 350 millones de euros. El complejo, que cuenta con una superficie de 54.000 metros cuadrados, formaba parte de la cartera de Unibail-Rodamco-Westfield desde 2011. 

Otra de las grandes operaciones la protagonizó Sareb, que anunció el 14 de julio la venta a diversos compradores por 235 millones de euros de una cartera formada por 23 activos terciarios de uso turísticos, que incluía apartamentos turísticos, apartahoteles, con un total de 1.729 habitaciones.

Además de estas grandes operaciones, el segmento logístico ha seguido exhibiendo músculo con transacciones por encima de 200 millones de euros, con operaciones de calado como la compra de Axa a Acciona por 65 millones de euros de un complejo de 58.000 metros cuadrados alquilado a Amazon en el distrito barcelonés de Sant Andreu que cumple funciones de última milla en la capital catalana y su área metropolitana.

El análisis elaborado por EjePrime recoge las grandes transacciones de oficinas, logística-industrial, retail, hoteles, vivienda en alquiler, multifamily, así como otros activos alternativos. No tiene en cuenta las compras de suelos o las inversiones en el accionariado de las empresas del real estate.

*Fuente:Ejeprime